Daniel Herrera es el mayor de dos hijos, su padre es economista y su madre es diseñadora industrial, es el tercer nieto de sus abuelos, por lo que al iniciar su vida ya contaba con la ventaja de tener personas velando por él.

Daniel nació en la capital de Colombia, Bogotá, donde desarrollo un interés por los deportes y un amor por el clima frío. Durante su infancia dividía su vida entre la tierra natal de su padre (Bogotá) y la de su madre (Cali), viviendo en Bogotá la mayor parte del año, pero viajando a Cali para todas sus vacaciones, donde se encontraba con su familia materna. Como era común en su época, su familia no se limitaba a padre y madre, sino hasta tíos y primos en primer y segundo grado, por lo que continuamente se vio rodeado de muchas personas de todas las regiones de su país.

Daniel estudió en un colegio militar desde temprana edad, lo cual le forjó un sentido de compañerismo muy grande que aprendió a aplicar en todas las facetas de su vida, junto con la costumbre de despertarse muy temprano. Posterior a la muerte de su padre, se trasladó definitivamente junto con su hermano menor y su madre a Cali, donde tuvo un nuevo inicio. Como todo niño, se adaptó con facilidad e hizo muchos amigos. Durante ese tiempo desarrollo interés por las artes marciales, la pintura y acampar en campo abierto, actividades hechas para alguien con mucha energía.

Durante su estadía en Cali,  Daniel tomo como modelo a seguir a su abuelo materno, pues sin llegar a ser profesional y solo con el sudor de su frente logró sostener a una familia de 6 hijos al punto de llevarlos a ser parte de la alta sociedad de la época, pensamiento que se le tallo en piedra a Daniel, pues quedaba claro que todo es cuestión de trabajar duro. Afianzó su afición por el Taekwondo, dedicando la mayor parte de su tiempo libre a éste, lo que lo llevo a conseguir cinturón negro y a competir muchas veces a nivel nacional.

Posterior a su grado, Daniel empezó sus estudios universitarios como historiador, carrera que curso durante solo un año pues a pesar de que le gustaba, no sentía la pasión que según él debía sentir, entonces Daniel empezó a estudiar derecho y descubrió ahí su verdadera pasión, pues entendió que ser abogado no es una profesión sino un estilo de vida. En su experiencia laboral se pueden encontrar juzgados, notarias y firmas de abogados litigantes, por lo que está acostumbrado a trabajos donde continuamente se relaciona con muchas personas. Actualmente vive con su pareja con quien tiene una relación de más de 4 años. Le gustan los animales (perros en especial), la comida picante, y a pesar de que abandono el Taekwondo le gusta mantenerse en forma.

Daniel ingresó a Quiroga Law Office porque quería hacer algo más que dinero, quería marcar la diferencia no solo en su vida, sino en la vida de alguien más, lo cual es básicamente la visión de la oficina pues la función principal es cambiar las vidas de los clientes mediante los diferentes casos.